EL CONSORCIO EDER FINALIZA EL PROYECTO “APOYO A MUJERES EMPRENDEDORAS EN LA RIBERA DE NAVARRA” DENTRO DEL PROGRAMA INNOVASOCIAL, FINANCIADO POR LA FUNDACIÓN CAJA NAVARRA Y LA FUNDACIÓN “LA CAIXA
Este proyecto ha tenido como objetivo principal apoyar el desarrollo y puesta en marcha de iniciativas emprendedoras por parte de mujeres en la Ribera de Navarra, apostando de forma efectiva por la igualdad entre mujeres y hombres en el ámbito del emprendimiento, como fórmula de generación de empleo, desarrollo profesional y personal de las mujeres, la mejora de su situación socioeconómica, su integración en el mercado de trabajo y su liderazgo en el ámbito empresarial.
El proyecto, desarrollado entre mayo de 2020 y abril de 2021, ha puesto en marcha 30 itinerarios de emprendimiento, 11 acompañamientos en el itinerario de emprendizaje y 7 seguimientos de negocios ya puestos en marcha.
Por otro lado, se han realizado un total de seis sesiones formativas, cuatro de ellas on line y dos presenciales, en torno a temas de habilidades emprendedoras, digitalización y emprendimiento.
Además, se ha puesto en marcha un servicio de mensajería instantánea para todas las emprendedoras a través del cual se les informa puntualmente de todas las convocatorias de ayudas publicadas y de las novedades legislativas.
Igualmente, se ha favorecido la visibilización del papel de la mujer en el ámbito laboral y se ha realizado un especial esfuerzo en el fomento del trabajo en red y la colaboración entre entidades vinculadas a la mujer de la Ribera Navarra.
A lo largo del proyecto, se han puesto en marcha 18 actividades económicas lideradas por mujeres, actividades a las que se ha continuado apoyando durante los primeros meses de vida mediante acompañamiento, asesoramiento y seguimiento.
Finalmente, se han realizado 3 mentorizaciones en colaboración con las Fundaciones Ilundain y Koine-Aequalitas, en las que mujeres en diferentes estadios del itinerario de emprendizaje, han compartido su experiencia.
Desde el inicio del siglo XXI, el índice TEA (porcentaje de la población de 18 a 64 años involucrada en actividades emprendedoras en fase inicial) diferenciado por género, ha mostrado una mayor propensión a emprender por parte de los hombres, si bien la brecha existente ha ido reduciéndose. El dato general, refleja a nivel estatal una tendencia estable por encima del 6% desde 2017 (5.2% en Navarra), lejos del promedio de otras economías desarrolladas, con valores cercanos al 10%.
La crisis provocada por la COVID-19, ha cambiado sin embargo este escenario de progreso y puede llevarse por delante los avances alcanzados . Además de las dificultades que atraviesan muchos sectores (y que no distinguen de género), las mujeres emprendedoras han debido y deben afrontar nuevos retos, relacionados con diferentes factores. Existen factores propiamente económicos (las emprendedoras sufren más la crisis porque su presencia es mayoritaria en el pequeño comercio y el turismo, los sectores más afectados por la parálisis), existen también factores socioculturales (dificultades añadidas para la conciliación con la vida familiar) y mayores problemas de acceso a la financiación.
En este entorno de crisis, es necesaria la visión para convertir el reto de la pandemia en oportunidad. Proyectos como éste, contribuyen a mejorar la situación de partida, de una forma innovadora, participada y sostenible, a través de programas específicos que desarrollen itinerarios de emprendizaje a medida de las necesidades de la persona, la idea de negocio y el entorno socioeconómico actual.
El proyecto ha tenido un presupuesto total de de 45. 075€, de los cuales el 80% ha sido financiado por el programa Innovasocial y el 20% restante por parte de Consorcio EDER